Finalizados los trabajos del mirador y del acceso al túnel romano de Montefurado
La Consellería de Cultura, Lengua y Juventud acaba de finalizar las obras de acondicionamiento del mirador y del camino por el que se accede al túnel romano de Montefurado, en Quiroga, unas actuaciones a las que se destinaron cerca de 17.000 euros.
Los trabajos sirvieron para mejorar la accesibilidad, seguridad e incluso la visibilidad desde el mirador, en la margen derecha del Sil. Entre otras actuaciones, se repararon las barandillas, se regularizó la superficie del suelo y se señalizaron la zona de aparcamiento y el inicio del sendero. En el espacio del mirador, se acondicionó la mesa interpretativa y se recolocó la barandilla, aproximándola al borde del acantilado para así obtener una mejor perspectiva del túnel.
El túnel de Montefurado es un sitio natural y arqueológico con notable valor paisajístico y geológico, protegido por la declaración de Bien de Interés Cultural del paisaje de la Ribeira Sacra y pieza fundamental del Geoparque Mundial de la Unesco Montañas do Courel. Tiene también un extraordinario valor histórico al ser una muestra representativa y prácticamente única del sistema de explotación minera aurífera de época romana, no solo del noroeste de la Península Ibérica sino en todo el ámbito del antiguo Imperio Romano.
Una galería para desviar el caudal
Esta galería artificial fue realizada en la época romana en el marco de una gran explotación minera aurífera. Perforaron el macizo rocoso para desviar el caudal del río Sil por este nuevo túnel, con el objetivo de desecar el meandro natural y aprovechar los depósitos auríferos asociados al mismo.
En el momento de su construcción, la longitud original debía alcanzar aproximadamente los 120 metros y la anchura los 20 metros, aunque en la actualidad solo se conservan unos 52 metros de longitud debido a varios derrumbes que se produjeron a lo largo del tiempo, uno de los más importantes documentado en la década de los años 30 del siglo XX.